Escasez

Hace varios días he querido empezar a escribir, mas encuentro un hueco tremendo en el lugar de donde sacaba las palabras, montones de ellas, bonitas e hiladas. Ya no están. Supongo que no encontrar lo que se busca es de alguna manera hallar aquello que hace falta. Al final no creo que importe tanto, todo seguirá, conmigo o sin mí.

Quisiera escribir tantas cosas pero no me alcanzan las palabras, y las que aún tengo poco a poco olvido cómo usarlas. No sé si estoy aburrido o agotado de buscar el sentido de todo, he pensado en Dios y en la Muerte, aunque claro, de la última es de la única que tengo confianza y certeza.

Nunca me he conocido mejor que cuando soy otro; brillante, lejano, sonriente, explosivo y estepario. Hoy soy lo que queda de lo que no fui, soy desconocido, diluido, sólo el pequeño cuerpo real de la enorme sombra que solía proyectar. Aun acabe sin palabras, torpe y sin memoria, me esforzaré cada día para mantenerme, para poder seguir siendo, viviendo, poder seguir viendo. Seguramente algún día leeré esto y sentiré que lo leo por primera vez. Hola, espero que lo hayamos logrado, que estés viviendo una vida feliz y que el desalmado entumecimiento no haya vuelto y sino; nada pasa, tarde o temprano, nada importa. Te amo.