
En el mundo de Hollywood, cada semana aparece una «nueva promesa» que, con suerte, no terminará protagonizando comerciales de seguros en cinco años. Pero Sophie Thatcher no es una de esas. No, ella llegó para quedarse, y lo está demostrando con cada papel que elige.

De niña prodigio a actriz revelación
Nacida el 18 de octubre del 2000 en Chicago, Sophie no creció soñando con ser influencer ni haciendo bailes de TikTok (o al menos no que sepamos). Desde pequeña, se inclinó por la música y la actuación, cantando en el coro de su iglesia y formándose en teatro musical. Básicamente, no tenía tiempo para perder en tonterías, porque su destino era brillar en la pantalla.

Hollywood la descubre (y no la suelta)
Su gran salto llegó en 2018 con Prospect, una película de ciencia ficción en la que compartió escena con Pedro Pascal (sí, el tipo que ahora sale en todo). Interpretó a Cee, una adolescente atrapada en un planeta lleno de tipos desagradables que, sorpresa, quieren matarla. Lo típico.

Pero su papel más conocido hasta ahora es en Yellowjackets (2021-presente), donde interpreta a la versión joven de Natalie, una chica que, tras un accidente aéreo, tiene que sobrevivir en medio de la nada. Lo que no es muy diferente a intentar encontrar un Uber a las 3 de la mañana en un festival de música.

Por si fuera poco, también formó parte del universo Star Wars en The Book of Boba Fett (2022), interpretando a Drash, la líder de un grupo de ciborgs con más estilo que sentido común. Y aunque la serie tuvo sus momentos cuestionables (cof cof persecuciones a 5 km/h cof cof), Sophie se las arregló para destacar.

¿Qué sigue para ella?
A diferencia de muchas «nuevas estrellas» que terminan atrapadas en franquicias sin alma o películas olvidables de Netflix, Sophie está eligiendo bien sus proyectos. Con una presencia en pantalla magnética y una habilidad para interpretar personajes complejos sin parecer que está actuando en una telenovela, su futuro se ve brillante.

Así que, si aún no has visto su trabajo, es momento de hacerlo. Porque en unos años, cuando esté recogiendo premios y protagonizando grandes producciones, podrás decir: «Yo la conocía desde Prospect«. Y aunque probablemente estés mintiendo, nadie te podrá contradecir.


